Experiencias penosas y graciosas

Ok.... Esto paso ya hace mucho tiempo, pero no por eso me deja de atormentar, cada que me acuerdo me da mucha pena y es como si estuviera viviendo ese momento de nuevo. Es lo peor. Estaba en tercer año de primaria, en una escuela nueva, en donde casi no me llevaba con nadie porque era nueva y había entrado a mitad de año. Era esa época en la que todos están enfermos y moquientos, y claro, yo era uno de esos niños enfermos y moquientos. No se por qué de pequeños somos mas descuidados, por no decir cochinos, pero el chiste es que se me estaba escurriendo el moco a cada rato y en lugar de ir por papel y sonarme, lo único que podía hacer era tratar de limpiarme con las mangas de mi sudadera. (No se hagan los asqueados, se que todos han llegado a hacer esto en algún momento). Hasta que en un momento uno de mis compañeros volteó a verme y me dijo: "Guácala! Tienes un moco!" Pensé que era en broma y voltee a ver a mi amiga con cara de "Que onda con este niño loco?"  y ...

Yo creo que a todos nos ha sucedido o hemos visto algo penoso o gracioso en la playa. Yo les contaré una de las tantas experiencias que que tenido en las playas, quizá pueda decir que una de la más penosa que me ha sucedido. Todo pasó en Cancún, en mi viaje de generación, como ya sabemos los viajes de generaciones se alocan y todo es descontrol, claro que yo no fui la excepción y no me supe controlar. El día anterior había tomado como una loca desquiciada, por lo que me encontraba con una resaca terrible.  Ese día, mi amiga y yo quedamos de ir a desayunar con un amigo que no era de nuestra generación ni de nuestra escuela pero se encontraba en Cancún por casualidad. Yo me imaginé que solo íbamos a ir a la plaza a desayunar, caminar o ver una peli, algo tranquilo. Así que decidí ponerme unos converse. Yo me estaba muriendo de hambre y se me antojaron unos tacos, fuimos a un restaurant en el que no se veían tan mal, pedí un platillo en el qu...