Playa

Yo creo que a todos nos ha sucedido o hemos visto algo penoso o gracioso en la playa. Yo les contaré una de las tantas experiencias que que tenido en las playas, quizá pueda decir que una de la más penosa que me ha sucedido.

Todo pasó en Cancún, en mi viaje de generación, como ya sabemos los viajes de generaciones se alocan y todo es descontrol, claro que yo no fui la excepción y no me supe controlar. El día anterior había tomado como una loca desquiciada, por lo que me encontraba con una resaca terrible. 

Ese día, mi amiga y yo quedamos de ir a desayunar con un amigo que no era de nuestra generación ni de nuestra escuela pero se encontraba en Cancún por casualidad. Yo me imaginé que solo íbamos a ir a la plaza a desayunar, caminar o ver una peli, algo tranquilo. Así que decidí ponerme unos converse.

Yo me estaba muriendo de hambre y se me antojaron unos tacos, fuimos a un restaurant en el que no se veían tan mal, pedí un platillo en el que venían tres y mi amigo quizo los mismos. Ni si quiera me pude comer uno porque me dieron ganas de vomitar, por lo que decidí dejarlos, cuando llego la cuenta los tacos costaron 300 pesos! Mi amigo no tenia suficiente para los suyos, así que yo los pague por el. Después de eso me dijeron que íbamos a ir al mar, lo cual me tomo desprevenida y obvio no traía un bikini, fui a comprar solo la parte de arriba porque ya me daba flojera regresar al hotel por mi bikini. 

Le pedi a mi amiga de favor que me lo abrochara porque ya se nos estaba haciendo tarde, así que solo me compre la parte de arriba y me quede con mis shorts que para el colmo eran blancos y traía unos calzones rojos.....

Llegamos al mar y me estaba quitando la blusa para meternos, justo cuando sentí mi parte de arriba mas floja me di cuenta de que no traía el bikini! Me cubrí lo mas rápido posible y voltee rápido para ver si alguien me había visto y para mi suerte ahí estaba un niño gordito viéndome....  quería que me tragara la tierra de la pena, tristemente eso no paso. 

Mi amiga me volvió a abrochar el bra, esta vez bien para que no se me desabrochara y nos metimos al mar. Después de estar nadando un ratito, decidimos irnos pero como yo traía puestos unos converse, pues se mojaron todos y se me marcaban los calzones rojos. Cuando ya estábamos en el camión dejamos todo el charco de lo majados que estábamos pero no nos dijeron nada, como estábamos todos exhaustos de tanto nadar nos nos dimos cuenta de que nos habíamos pasado nuestro hotel, hasta que nos dimos cuenta de que ya estábamos por otros hoteles que no hablamos visto en nuestro camino de ida. Nos vamos en la parada siguiente y nos decidimos ir caminando, porque ya no nos faltaba mucho para llegar a nuestro hotel.

El chiste fue que ese día estaba cruda, pagué muchísimo dinero por unos tacos que ni si quiera me comí, un niño gordito me vio las bubis, todos me vieron los calzones rojos y nos pasamos el hotel.

Esa fue mi bella experiencia, ¿A ustedes les ha sucedido algo similar o penoso en la playa?